martes, 13 de abril de 2010

Cuando Dreamworks se deja de animales coolface

Resulta que entonces produce buenas pelis de animación. Y Cómo entrenar a tu dragón es un claro ejemplo. Un flin que desde luego no es el colmo de la originalidad, no es una de Pixar ni ná, pero no lo pretende, y eso le favorece, logrando así salir una peli de aventuras que, aunque predecible sea, está hecha con mucho cariño y agrada enormemente.

El argumento gira en torno a una aldea vikinga que es constantemente asediada por dragones. Ahí para hacerte un hombre tienes que cargarte dragones, y eso es lo que pretende el chaval más inútil que siempre la caga en los ataques. Pero un día, consigue golpear de potra a un dragón que es considerado lo más peligroso y que nadie ha visto nunca. Pero cuando lo encuentra por el bosque cercano atrapado y herido, no puede rematarlo. En su lugar lo libera, y gradualmente va aprendiendo cosas de él y del resto de los dragones. Y hasta aquí puedo leer del argumento.